La empresa Still demostró ya en el año 2011 que las carretillas elevadoras pueden ser ecológicas. En aquel momento, la empresa introdujo en el mercado la carretilla elevadora híbrida Still RX 70 Hybrid. Un motor eléctrico respalda a su motor diésel de 36 kW.
Cuando la carretilla frena, el generador produce electricidad. Unos condensadores de alto rendimiento, los Ultra Caps, la almacenan y la devuelven al motor eléctrico cuando hay una aceleración. Tal como indica el fabricante, el motor eléctrico permite trabajar con un motor diésel más pequeño. La capacidad de carga de la carretilla híbrida es de 3,0 a 3,5 toneladas. Según Still, el recargo en el precio de la carretilla híbrida se amortiza a partir del segundo año con un uso de 1.500 horas de servicio anuales.