El elevado número de matriculaciones de Iveco Eurocargo también en Alemania demuestra que tiene más éxito que sus hermanos mayores Stralis y Trakker. En opinión de los probadores de la revista especializada «lastauto omnibus», quienes estuvieron hace más de dos años analizando detalladamente el modelo Iveco Eurocargo 120E25, esto se debe —entre otros aspectos— a la sencillez de su apariencia y la madurez que proporciona una experiencia de 20 años.
Los probadores también señalaron que se habían incluido prácticamente todas las variantes. Tan solo mostraron ciertas limitaciones en cuanto a la motorización. Aunque los motores de Cummins de cuatro y seis cilindros ofrecían potencias de entre 140 y 299 CV, precisamente en el sector de cuatros a seis cilindros se encontraron con un vacío. Según «lastauto omnibus», el cuatro cilindros solo funciona hasta los 182 CV. Quien busque una potencia mayor para camiones de 11,99 toneladas, debe recurrir al seis cilindros de idéntica construcción. Aún así los expertos opinan que, en el motor de Cummins, la pérdida de carga útil vinculada al seis cilindros se mantiene dentro de unos límites ajustados. Con sus 470 kg de peso en seco, solo pesa 80 kg más que el cuatro cilindros.
Iveco Eurocargo: suavidad de marcha mediante seis cilindros
Los probadores quedaron absolutamente convencidos de la potencia de frenado del motor de 130 kW del seis cilindros; el cuatro cilindros alcanza unos 90 kW. Sin olvidar la suavidad de marcha, una disciplina que un motor de seis cilindros domina mucho mejor que cualquier otro de cuatro cilindros. Con la misma vehemencia con la que el Eurocargo de 251 CV y un peso total de 12 emprende sus tareas, transmite la impresión de que necesita un remolque para dominar su temperamento.
Los probadores se muestran algo más prosaicos cuando hablan sobre el puesto de trabajo en el Iveco Eurocargo 120E25. Consideran que los instrumentos, en este caso la versión Highline del Stralis, son coquetos y están dispuestos con claridad. Lo único mejorable: la facilidad de lectura. La comodidad de la amortiguación se corresponde con los estándares de esta clase, aunque el volante transmite ligeramente las irregularidades en la calzada. Aunque los ruidos en el interior son relativamente altos, 71,2 dB(A) a 85 km/h, en opinión de «lastauto omnibus» no resultan incómodos.
Iveco Eurocargo: la cabina podía ser algo más grande
Por el contrario, la cabina del conductor resulta algo más estrecha y corta que la de la mayoría de sus competidores. Los probadores también echaron en falta bandejas al alcance del conductor y libertad de movimiento. El acceso al asiento del pasajero resulta complicado. «lastauto omnibus» se mostró satisfecha con la altura interior de la cabina, algo más de 1.500 mm.
Los resultados de la prueba fueron positivos: el Iveco Eurocargo 120E25 es un buen vehículo como camión ligero para el transporte de distribución, con una carga útil suficiente, un confort de marcha correcto y nada problemático en el trabajo diario.